Premezclas de aditivos
Antioxidantes
El envejecimiento del alimento y también los procesos industriales a los que es sometido pueden provocar la oxidación de las grasas y de otros compuestos lábiles como vitaminas, xantofilas, etc.
Los antioxidantes rompen la cadena oxidante, bloqueando los radicales libres e impidiendo la propagación de la reacción. Las premezclas “antioxidantes” están formuladas con: sustancias ANTIOXÍGENO (bloquean la reacción en cadena), sustancias REDUCTORAS (con un potencial
redox por debajo del potencial de las sustancias a proteger) y sustancias SINÉRGICAS (capaces de modificar el potencial de oxido-reducción del
medio creando una reserva de H+ con la que se regenera el antioxidante).
Antioxidantes en polvo
Evitan la oxidación del alimento protegiendo los nutrientes más lábiles de los tratamientos mecánicos (molturación, granulación, etc.). Especialmente indicados en alimento acabado y en correctores minero-vitamínicos.
Antioxidantes en líquido
Por sus características son ideales para el tratamiento de alimentos que se presentan en forma líquida, especialmente grasas y aceites.
Indicados para evitar el enranciamiento de harinas animales de pescado, carne y subproductos de matadero.
Aromatizantes
Los sentidos corporales relacionan el animal con su entorno y por tanto influyen en sus actos y funciones, entre otras la ALIMENTACIÓN. Es por ello que el color, olor, sabor y textura de los alimentos condicionan su aceptabilidad y digestibilidad. Los saborizantes y aromas incrementan la APETENCIA del alimento y por ende su consumo.
Los diferentes tipos de aromas se suministran con diferentes intensidades y diferentes niveles de edulcoración.